¿Cómo ayuda el queso a tus hormonas digestivas?
¿Cómo ayuda el queso a tus hormonas digestivas?
Uno de los grandes beneficios con los que cuentan los productos lácteos es su elevada carga de proteínas y grasas beneficiosas, lo que de entrada los convierte en un producto altamente saciante y con capacidad de proveer al organismo de la cantidad de dos de los macronutrientes (grasas y proteínas) que le permiten funcionar. Esto hace que, al consumir queso (especialmente si se trata de los más curados, por su concentración), sintamos que con poca cantidad tenemos suficiente. sin embargo, esta no es la única razón, y es que las proteínas y las grasas presentes en el queso, estimulan la liberación de hormonas que aumentan la sensación de saciedad y retrasan la aparición del hambre. Algunas de estas hormonas son el GLP-1 (que ayuda a regular el apetito), la CCK (que estimula la digestión, aumenta la sensación de saciedad y estabiliza los niveles de azúcar en sangre), o los péptidos YY, que reducen el hambre y regulan el apetito. Por otro lado, las grasas y proteínas presentes en el queso ralentizan la absorción de los azúcares presentes en otros alimentos, evitando picos de glucosa elevados. Es hora de dignificar a la leche y sus derivados como grupo alimenticio, dándole la posición correspondiente en la pirámide alimentaria.

Uno de los grandes beneficios con los que cuentan los productos lácteos es su elevada carga de proteínas y grasas beneficiosas, lo que de entrada los convierte en un producto altamente saciante y con capacidad de proveer al organismo de la cantidad de dos de los macronutrientes (grasas y proteínas) que le permiten funcionar. Esto hace que, al consumir queso (especialmente si se trata de los más curados, por su concentración), sintamos que con poca cantidad tenemos suficiente. sin embargo, esta no es la única razón, y es que las proteínas y las grasas presentes en el queso, estimulan la liberación de hormonas que aumentan la sensación de saciedad y retrasan la aparición del hambre. Algunas de estas hormonas son el GLP-1 (que ayuda a regular el apetito), la CCK (que estimula la digestión, aumenta la sensación de saciedad y estabiliza los niveles de azúcar en sangre), o los péptidos YY, que reducen el hambre y regulan el apetito. Por otro lado, las grasas y proteínas presentes en el queso ralentizan la absorción de los azúcares presentes en otros alimentos, evitando picos de glucosa elevados. Es hora de dignificar a la leche y sus derivados como grupo alimenticio, dándole la posición correspondiente en la pirámide alimentaria.
